viernes, 16 de noviembre de 2012

NUESTRO COMPROMISO COMO HERMANOS DE LAS AGUAS EN EL "AÑO DE LA FE"

¿Por qué en nuestra Hermandad es necesario reflexionar juntos nuestra fe y orar en común al menos una vez al mes?

Nuestra Regla 7ª nos recuerda que “los hermanos han de sentirse ante todo, personas que han aceptado consciente y libremente la fe cristiana”.

Quiere esto decir, que ser hermano de las Aguas es “sentirnos” consciente y libremente cristianos porque deseamos de todo corazón asumir y vivir en nosotros –en todo lo largo y ancho de nuestro ser-, la presencia amorosa de Jesucristo en nuestras vidas. Pertenecer a la Hermandad es sabernos con nuestros hermanos en camino tras los pasos de Jesús, a imitación de María nuestra madre, para alcanzar nuestra propia estatura en Cristo Jesús y vivenciar e irradiar en nosotros su Reino: -de vida, de verdad, de justicia, de paz, de gracia y de amor. “Fe y seguimiento de Cristo están estrechamente relacionados. –nos dice el papa Benedicto XVI- Y puesto que supone seguir al Maestro, la fe tiene que consolidarse y crecer, hacerse más profunda y madura, a medida que se intensifica y fortalece la relación con Jesús, la intimidad con Él”.

Y porque estamos sedientos –“El que tenga sed que venga a mí y beba” nos recuerda nuestro amado Titular, el Smo. Cristo de las Aguas-, aceptamos revitalizar nuestra fe, dando una respuesta coherente al llamado del papa a vivir intensamente el “Año de la fe”.

Y lo hacemos:

Por una parte, retomando nuestra Oración de Hermandad todos los primeros lunes de cada mes (el próximo será el 3 de diciembre) de 20 a 20:30 hs en nuestra Capilla.

E inauguramos dentro de nuestra Hermandad unas sesiones, en principio mensuales, de reflexión, intercambio y profundización, que denominamos: “En búsqueda de nuestra fe”. Serán a partir del jueves 22 de noviembre de 20 a 21 hs en la Casa Hermandad.
Estás cordialmente invitado a recorrer este itinerario de fe con tus hermanos.