La iglesia católica ha entrado en un año de suma importancia para nuestro futuro. No se trata de una celebración al uso, ni de una consagración ordinaria del año a un motivo o colectivo concreto dentro de nuestra religión, sino que se trata de una llamada a la movilización de la cristiandad, una llamada a la nueva evangelización, real, física y tangible.
Su Santidad el Papa, Benedicto XVI, por medio de la carta Porta Fidei, convoca el Año de la Fe para luchar contra el "olvido de Dios" imperante en nuestra sociedad, y que nos ha llevado a los propios católicos a vivir nuestra religión de forma superflua, sin ahondar en los pilares fundamentales que sostienen nuestra creencia.
La Diocesís celebró en la tarde de ayer la apertura del Año de la Fe, mediante una Eucaristía en la Santa Iglesia Catedral, en donde nuestro Arzobispo desgranó los motivos de peso que convierten este año litúrgico en una puerta hacia el futuro de la Iglesia. (Homilía de Monseñor Asenjo en la apertura del Año de la Fe http://www.archisevilla.org/secciones.php?sec=1&ssec=4&id=1860&busca ).
Las Cofradías, que fuimos concebidas para llevar el mensaje de Cristo a las calles de nuestra ciudad, debemos ser parte esencial en el Año de la Fe, como vehículos de esa nueva evangelización que necesita la Iglesia Católica para fortalecer los pilares de los valores cristianos y recuperar la profundidad de la vida en comunión con Dios.
La Hermandad de Las Aguas se adhiere al compromiso adquirido por nuestra Diócesis, de vivir el Año de la Fe con firmeza, "la tibieza desacredita al cristianismo" dice la carta Porta Fidei del Santo Padre, con el objetivo de transmitir a todos los hermanos la importancia de caminar juntos, con la ayuda de Cristo, hacía un futuro prometedor para el orbe católico.
